El Amor: Pasión, Convivencia o Entrega (Parte 1)

He estado pensando desde hace tiempo en el amor.  ¿Qué es? ¿Cómo definirlo? ¿Cómo se reconoce? ¿Se ve? ¿Se toca? ¿Es frío, tibio o caliente? ¿Es rosado, amarillo, rojo, blanco, negro o multicolor? ¿Cuándo nace? ¿Estar enamorado es sentir amor?

• ¿Qué es? ¿Cómo se define?
  

Si usted, mi querid@ lector(a) se ha hecho esta pregunta y ha tratado de indagar a fondo al respecto, seguramente se ha encontrado con disertaciones sin final, con opiniones encontradas y hasta opuestas.  El amor es de esos conceptos tan amplios, que llega a darse la vuelta a sí mismo.

Para algun@s, el amor es una suerte de entrega total, un sacrificio del yo hacia la otra persona, una especie de fusión espiritual entre dos personas.  Otr@s piensan que el amor está íntimamente ligado a la pasión y sienten que al disminuir el deseo, el amor se va con él.  Otr@s tant@s opinan que el amor es algo como la amistad, pero en grado superlativo, es algo de compartir, de toma y dame en el buen sentido de la expresión, la convivencia en su mejor expresión.  Incluso hay quienes piensan que el amor son esas mariposas que se sienten en el estómago al sentir la cercanía de la persona “amada”.

Para mí, después de haber conocido todo lo anterior; después de haber leído a Leo Buscaglia, Richard Bach  y Walter Riso principalmente, creo que el amor es una amalgama de un millón de pequeñas cosas que se unen para formar algo maravilloso.  Es pasión y ternura, compromiso y libertad, es nadar en el aire y volar en el agua, son polos opuestos equilibrados gracias a una palabra: Amor.

• ¿Cómo se reconoce? ¿Se ve? ¿Se toca? ¿Es frío, tibio o caliente? ¿Es rosado, amarillo, rojo, blanco, negro o multicolor?
  

Después del acercamiento anterior, la pregunta siguiente seguramente será: ¿Y cómo puedo reconocer el amor?

Después de haber sentido ese estado de ebriedad espiritual que ocasiona el inefable amor, creo que no se le reconoce hasta que está uno inmerso en sus aguas profundas.

No se ve, sino cuando uno tiene los ojos cerrados.  Cuando no necesitas mirar para ver.  O ver para observar.  Sabes que está allí, pero es invisible a los ojos.

Se toca a través del tacto del (la) otr@.  Es cálido algunas veces, otras puede derretirte de tanto calor…  Y si se enfría es por que hay algo que no anda bien…

De colores…  Pues creo que los tiene todos.  ¿Por qué?  Simple.  El amor es tan extenso que no se trata de una pareja, se trata de padres, hijos, amigos, parejas y algunas otras cosas.  Es rosado por ternura, rojo por pasión, blanco por amistad, azul por compasión, amarillo por protección y pare usted de contar.

Para la próxima entrega de este artículo, hablaré de lo que pienso sobre las dos preguntas de entrada que dejé sin contestar.

¿Cuándo nace? ¿Estar enamorado es sentir amor?

Palabras de Sabiduría:

Amar no es mirarse el uno al otro;
es mirar ambos en la misma dirección

Antoine de Saint-Exupéry