lunes, 23 de julio de 2012

Embarazo – ¡6 meses!

Hemos llegado a los 6 meses y esta aventura de ser padres cada vez resulta más hermosa.  Ya, Sarah, como hemos decidido que se llamará nuestra hija no es sólo una imagen en un monitor, ya ha dejado de ser una serie de luces flotando sobre un fondo negro.

claudy_embarazada_casi_4_mesesAhora, con cada nueva consulta a la gineco-obstetra y cada nuevo ecosonograma, nuestra hija se ve menos, porque está cada vez más grande.  Donde antes podíamos ver su cuerpo entero, ahora apenas cabe la cabeza.

Hemos visto cómo reacciona ante la voz de papá y mamá.  Hemos visto cómo cambia de posición una y otra vez y cómo mueve sus manos haciendo que parezca que nos está saludando.

Cada imagen nos acerca más a esa niña que va a nacer en apenas un trimestre.  Esa niña que ahora está presente en la forma de movimientos que se sienten en el vientre de su mamá.  Más allá incluso de los movimientos de la nena, una escena que no pudo sino recordarnos a la película Alien: el octavo pasajero fue documentada para la posteridad en las siguientes fotos:

baby_rise

Sólo imaginen mi impresión, la de su mami claro, cuando vimos semejante cosa.  ¡Es una maravilla! Es otra señal que nos hace caer en cuenta de lo próximo que está ese cambio que se aproxima a nuestras vidas.  Un cambio anhelado, deseado con toda el alma, pero que a la vez nos genera un cierto temor, como un susto de querer hacerlo bien, de no equivocarnos.

Ya queremos tener a esta bebé en los brazos, nos intriga verla a los ojos, sentir su calor y sus manitos aferrándose a nuestros dedos, nuestras caras, orejas, cabellos o lo que se les ponga por delante.  Estamos llenos de emoción sólo de imaginar a este pequeño milagro ya fuera del vientre de su mamá.

Sarah es una niña que vino por el gran deseo de sus padres de compartir algo mucho más trascendental que la vida misma, un hijo.

claudy_embarazada_casi_6_mesesEs ahora cuando a nosotros nos toca ser mejores, mejores de lo que hemos sido, mejores amigos, mejores padres, más pacientes, más tolerantes, más disciplinados en algunos casos.  Es ahora cuando debemos buscar un equilibrio que comience a guiar a nuestros hijos, en particular a la primera que viene en camino, a través de la vida con ojos de esperanza y éxito.

Es ahora cuando más resuenan en mi cabeza la oración de un padre que fuera citada en este mismo blog hace ya más de dos años.

Tener un hijo nos hace responsables de quién llegará a ser esa persona.  Su futuro está, en buena parte, en nuestras manos y por ello debemos ponerle corazón a cada cosa que tenga que ver con ese ser tan especial que se acerca a nuestras vidas.

Palabras de Sabiduría:


El mejor legado de un padre a sus hijos
es un poco de su tiempo cada día

Leon Battista Alberti

miércoles, 18 de julio de 2012

La desnudez es cuestión de confianza

La desnudez es un tema controversial, siempre lo ha sido.  Un cuerpo desnudo, en ocasiones es escandaloso.  El tabú que ha rodeado durante siglos al ser humano y a su piel al descubierto es evidente en la mayoría de las culturas del mundo.

La desnudez es entonces una cuestión de confianza.  Quienes suelen vernos desnudos son personas muy allegadas, en algunos casos el círculo extremadamente íntimo, la pareja, los padres y en tal caso, los doctores.

sahara nudeEsto radica, a mi parecer en varios puntos focales que se han ido afianzando con el paso del tiempo.  Por ejemplo, la vergüenza de nuestro propio cuerpo.  Conforme la publicidad y los anuncios venden cuerpos perfectos retocados con programas de edición de imágenes y videos, el mostrar nuestros cuerpos parecernos fuera de lugar, incómodo y hasta ridículo.  En la medida en la que nuestra confianza sobrepasa tales autocríticas, el desnudo puede volverse algo más natural.

Las reglas y lineamientos sociales.  En muchas culturas, mostrar los genitales o adornar zonas erógenas del cuerpo, representa lo que en otras culturas es la alta costura o las prendas valiosas.  Lo social está íntimamente ligado a nuestra percepción del desnudo y la capacidad de mostrar nuestro cuerpo al descubierto sin sufrir de la vergüenza característica de ese hecho.

Por otro lado, la desnudez no es puramente física.  Un cuerpo desnudo, puede mostrarnos a alguien que está muchísimo más cubierto que un esquimal.

Sin embargo alguien puede haberse mostrado completamente desnudo ante nuestros ojos y no reparamos en ello por el simple hecho de no verlo frente a nosotros.  Las palabras, dichas desde el corazón transparentan la piel.  Su luz traspasa cualquier barrera y permite ver, cuando son dichas desde el corazón, a una persona en su estado más puro.  Plenamente desnuda, un alma ante nosotros, dejando fluir palabra tras palabra revela muchísimo más que un millón de imágenes que describan con perfecto detalle la piel entera de una persona.

nude jeansYo mismo me he desnudado justo aquí, en este espacio más de una vez.  He escrito cuanta cosa pasa por mi cabeza y mi corazón y me he volcado sobre estas líneas como si de un lienzo se tratara.

Por cierto que como si de despojarme de toneladas de ropa y trapos que me atrapan, cada vez que tengo la oportunidad de volcar una andanada de sentimientos sobre estas páginas, consigo dejar atrás tan pesada carga y aligerar mi paso con alegría y fluidez.

Confíen, desnúdense, que no tiene nada de malo.  La desnudez es algo natural y muy útil.  Sirve para vernos unos a otros sin nada que ocultar, sin amenazas escondidas, sin máscaras, sin ínfulas de superioridad.  Desnudos somos todos iguales.  Desnudos tocamos piel con piel y desnuda el alma podemos entregarnos a lo que sea.


Deja llenarme de tu desnudez
para vestirme por dentro

Ricardo Arjona