domingo, 23 de enero de 2011

Invitad@ Especial – Yo Quiero

Alguien muy especial para mí, la protagonista de Almas Gemelas, Claudy De Sousa, me confió la lectura de un escrito de su autoría de hace más de 10 años.  Mientras ella ordenaba algunas cosas en su casa, consiguió estas fabulosas líneas y me concedió el honor de su lectura.  Me sentí tan identificado en varias ocasiones de mi vida que sólo atiné a pedirle su permiso para publicarlo en este espacio.  Su alto contenido emotivo me tocó, como espero que toque a algun@s de ustedes.  Los invito a transportarse a los distintos momentos de su vida que, seguramente, estarán reflejados en estas líneas.

Yo quiero y necesito salir de toda esta situación que estoy pasando.  Quiero quererme, aceptarme y entenderme tal y como soy.  Quiero creer firmemente en mí.  Quiero renovar mi fe en Dios, en mí y en la vida.  Quiero estar llena de energías positivas y buenos pensamientos.  Quiero ubicarme en la vida.

Quiero reencontrarme, quiero recuperarme.  Quiero que mi alma y mi espíritu se re-fortalezcan.  Quiero recuperar el control de mi ser.  Quiero encontrar y entender mi verdad.  Quiero sonreír desde lo más profundo de mi corazón, tanto, que en cada centímetro de mi cuerpo se manifieste esa sonrisa.  Quiero que mi aura esté completamente limpia y diga sólo cosas positivas de mí.

Quiero lograr que exista una verdadera comunicación entre Dios y yo.

Quiero deslastrarme de todo lo que me hace daño.  Quiero formarme un próspero y maravilloso futuro.  Quiero que mi vida sea absolutamente productiva y llena de logros.  Quiero relajarme y sentirme bien.  Quiero asimilar con alegría las nuevas experiencias que me ofrece la vida.  Quiero amarme, cuidarme y valorarme.  Quiero superarme cada día más.  Quiero ser, cada día, más.  Quiero demostrarme y comprobarme a mí mismo y al resto del mundo que tengo una cantidad enorme de virtudes y que sé utilizarlas.

Quiero hacer el bien, repartir amor y ser absolutamente útil para el mundo.  Quiero ser capaz de ayudar a quien me necesite.  Quiero abrirme al mundo y a sus cosas hermosas y a su gente buena.  Quiero formar una familia bonita, sana, verdadera.  Quiero tener hijos, amarlos y educarlos.  Quiero ser una mujer exitosa en mi profesión y en mi vida personal.

Quiero lograr mis sueños, alcanzar mis metas y romper las barreras y obstáculos que se me presenten.

Quiero ser LIBRE. Quiero ser FELIZ…

Yo puedo hacer todo esto y más y decido hacerlo de este mismo instante.

GRACIAS A LA VIDA Y A DIOS POR DARME LA OPORTUNIDAD y gracias por poner gente en mi camino que me ayude a lograr lo que quiero, abrir los ojos y salir adelante…

Amén.

Ccs, 11/07/98

Sueños

jueves, 13 de enero de 2011

Corazón, Convicción y Consciencia

colored keys Una vez más, mis dedos tratan de deslizarse sobre el teclado tan rápido como los pensamientos a través de mi mente.  Apenas hace un par de semanas estaba en la década pasada.  2012 se acerca y aunque no creo que venga el apocalipsis, definitivamente creo que será el fin de un gran ciclo y el comienzo de un nuevo orden universal.  Y no digo que el mundo dejará de existir como lo conocemos, pero muchas cosas cambiarán.

Los aprendizajes de fin de año fueron intensos, y no han bajado el nivel en el comienzo de esta nueva década.

punch-you Resulta entonces que en ocasiones nos encontramos en una lucha interna, de las más cruentas que tendremos en la vida, dado que es una lucha con y contra nosotr@s mism@s.  De las más duras:  el corazón contra la razón.

Muchas veces resultará que las casualidades, aunque siempre he dicho que tal cosa no existe, nos llevarán a una situación específica.  Una situación donde nuestra intuición, nuestro corazón y hasta nuestro cuerpo nos griten que debemos avanzar.  Sin embargo, nuestra mente, nuestras convicciones y nuestros planes pueden pedirnos imperiosamente que nos detengamos.

Si estuvieran en la situación de comenzar una relación sabiendo que tienen una “fecha de expiración” porque existe una posibilidad muy alta de que tal relación dure sólo hasta ese momento…  ¿Qué harían?  Si el corazón palpita con premura ante la presencia de esa persona, si las sonrisas están a flor de piel en su compañía y si el peor día de tu vida ya no parece tan malo sólo por el hecho de hablar con ese ser…  ¿Qué harías?  ¿Dejarías de vivir semejante experiencia por miedo al dolor de una separación anunciada?

¿Apostarías al cambio? ¿Darías el paso al frente y te montarías en ese tren con todos los riesgos que implica?  Después de todo, como dice Alan Kay, la mejor manera de predecir el futuro es inventarlo.  Si algo no está escrito en la vida es cada paso que daremos en nuestro camino.  Por lo menos, esa es mi opinión también.  Sí creo que hay ciertos hitos, puntos importantes, en nuestras vidas que son ineludibles.  Pero cómo a través de cuál camino llegaremos a ellos…  Eso es otro tema completamente distinto.

A69CCX He aquí, que el corazón brinca y grita:  ¡arrójate a volar!  Mientras que la convicción de caminar al borde de ese abismo ha hecho lo suyo para mantenernos sanos y salvos y alejados, hasta cierto punto, del dolor.  Por último, la consciencia que siempre nos invita a pensar un poco más analiza el camino sinuoso por el que hemos transitado y la posibilidad de volar y da pros y contras de cada uno.

Cada quien tiene un trabajo, cada cual tiene su puesto, y todos quieren salir ganando.

Meditating La razón nos invita a ver las cosas fríamente, de manera objetiva y con los ojos puestos en el futuro.  Evaluar el mejor curso de acción.  El gran problema es que esto supone desprendernos de cuánta emoción conozcamos y dejar la subjetividad de un lado, lo cual en algunos casos puede ser muy difícil.

En un costado, viene la convicción.  Los planes, las ilusiones, las metas…  Todo aquello que hemos atesorado en nuestras mentes y parte en nuestros corazones y que supone el conjunto de logros que necesitamos para ser felices.  Eso que nos motiva, esa cantidad de cosas que nos hace levantarnos cada mañana y soñar a futuro para alcanzar horizontes más lejanos.  Nos trazamos un camino, planificamos y esa convicción es la que nos mantiene en él.

Finalmente, llega el corazón, brincando, asomándose de lado a lado del camino en busca de una aventura, de algo que lo convierta en un héroe, de algo que pueda hacernos dar un brinco hacia adelante, hacia un costado o, incluso hacia arriba…

En fin… Yo opino que hay que buscar cierto equilibrio entre las tres cosas y, de esa manera, usar la razón para encausar al corazón y poder modificar la convicción a medida que el camino lo requiera.

Palabras de Sabiduría:

Para lograr algo grande, necesitas tres cosas:
Un Sueño, un apoyo y un refugio.

Uno de los ejecutivos de Oracle

miércoles, 5 de enero de 2011

Conversaciones Conmigo - Año nuevo, sección nueva

Bienvenid@s mis queridísim@s lectoræs.  Como verán en el título, esta será una nueva sección, como lo es “Cancionero” donde plasmaré cada cierto tiempo, conversaciones que tengo de tanto en tanto conmigo mismo.  Dada la fecha, porque este artículo está siendo escrito el 31 de diciembre de 2010, comenzaré deseándoles un número infinitamente grande de bendiciones para este nuevo año y que cada paso que den sea para aprender y volverse mejores seres humanos.  Que cada uno de los próximos 365 días estén llenos de sorpresas, lecciones, bondad y amor en sus corazones.  Que comprendamos todos el verdadero significado del amor y que entendamos de una vez por todas que el mayor obstáculo entre nosotros y nuestros instantes felices no es otro que nosotros mismos.  Dicho esto…  Que comience la tertulia.

Vaya vaya, mi amigo.  Hace un par de semanas no hubieras pensado estar donde estás.  No se te hubiera ocurrido imaginarte estar caminando la noche del 31 de diciembre de 2010 en la compañía de una persona tan especial, compartiendo pensamientos, sonrisas, tristezas, preguntas, respuestas y momentos que durarán una vida entera en tus recuerdos.

Hace unos meses no hubieras ni soñado con conocer a las personas a las que has conocido, con escribir lo que has escrito ni con aprender todas las lecciones que te han dado los últimos meses de este año.  Definitivamente, Dios, el Universo, los Grandes Maestros o como sea que lo quieras llamar tiene(n) una manera muy particular de mostrarte el equilibrio que debe estar presente en todas las áreas de tu vida.

Son las 9:30pm y hace 3 horas estabas en una playa, mirando las luces del morro iluminar el horizonte.  Mojado de pies a cabeza, recibiendo una brisa que en cualquier otro momento te hubiera helado hasta el ánimo, pero no hoy, no en ese momento.  La calidez de la felicidad, del amor, te mantiene en pie, erguido ante el viento sin que lo sientas agresivo.  Un momento perfecto.  Un momento feliz.  Un momento.  Un instante.

¿Y es que acaso la felicidad puede durar más que eso?  ¿Un instante?  Estás convencido, mi querido amigo, de que la felicidad es precisamente la unión de todos esos instantes felices y yo, desde luego, te apoyo en esa teoría.

¿Pero qué pasó?  Hace casi una hora, ningún pensamiento particular…  El alma se remueve inquieta, hay sentimientos recorriendo tu corazón que se pasean de un lado a otro.  Sientes una inmensa felicidad, por otro lado llega la tristeza, hay nostalgia también andando de la mano de las otras dos y, finalmente, la incertidumbre de no saber en absoluto qué pasará dentro de 2 horas y 15 minutos, cuanto llegue el 2011 y mucho menos 2 meses después.

Felicidad de estar donde estás.  De haber llegado hasta donde lo has hecho y de saberte en capacidad de cumplir las metas que te has propuesto.  De haber aprendido tanto y de haberte levantado de la mano de tus amigos, por encima de una turbulencia que amenazó con desbaratarte el camino.  ¿Qué fue lo que pasó?  No tienes idea, pero te desequilibró.  Una vez que conseguiste el balance de nuevo, las cosas comenzaron a suceder.  ESAS cosas, esas que hoy te hacen tan feliz.  Volviste a ser tú.  Y aunque tus prioridades se han ido moviendo conforme vas aprendiendo, te has dado cuenta de que has hecho las cosas bien.  Tu balance es positivo, hay gente que te quiere y te extraña.  Hay gente que se preocupa por ti.  Hay gente en la que has dejado huella y que ha dejado profunda huella en ti.  Toda esa gente te confirma, con sus acciones hacia ti, que las decisiones que has tomado han sido en pro de algo bueno y, probablemente, más grande que tú mismo.

Hoy, hace unas horas, le diste gracias a Dios por todo.  Lo bueno, lo que creíste malo y todo lo que te ayudó a conseguir en apenas un año.

Tristeza.  Presente al darme cuenta de que las cosas pudieron ser muy distintas con ellas, mis Rs…  O quizás con ELLA.  O tal vez, con tu pasado.  Pero una vez más lo analizas y te das cuenta que de no ser por lo que ha pasado en cada parte de tu vida, hoy no estarías viviendo este momento presente, sino algún otro momento paralelo que vaya a parar, de alguna forma, en el próximo gran hito de tu vida.  Nada sucede por simple azar.

Nostalgia.  Extrañas tantas cosas.  Hacer el Pan de Jamón, pelear por la tocineta, las aceitunas y tratar de comerte algunas de las pasas y las alcaparras.  Extrañas hacer la ensalada de gallina, inventar algo nuevo en la cocina y recibir el año en sus brazos.  Fueron un montón de años…  El 24 las llamaste y no atendieron…  ¿No escucharon?  Eso espero.  Has tratado de comunicarte, pero parecieran decididas a borrarte de su vida…  Tristeza.  Pero no está en tus manos.

Incertidumbre.  Porque a pesar de caminar con paso firme y decidido, mirando al frente y sin una pizca de miedo en tus ojos, sabes que no puedes hacer planes, porque al final del día todo puede cambiar.  Sueñas, vuelas, aterrizas y despegas una vez más.  El rumbo es incierto…  Incertidumbre…  Pero feliz.  ¡Siempre feliz!

Aquí y ahora.  Estás aquí, en este momento y ya es hora de sonreír, de seguir viviendo el presente y valorando cada momento como si fuera el último, porque no sabes cuánto más durará tu respiración.  ¡Claro que esperas que sean años y muchos!  Pero nadie puede asegurarlo.

Hoy, piensas en la fortuna que tienes al contar con tu madre, tu padre, Oscuridad, Thriel, Soronthar, Ione, Manolacho, Belle y tanta otra gente.  Fanny, TCMC, Luz, Fachy, Ely, Claire, Abra…  Sea de La Macha, Karina, Yuny, Claudy…  Y aún más…  Que si sigo nombrando, esto se va a poner como demasiado largo.  Corazones que se han abierto para recibirte y darte lo mejor que se puede dar como regalo…  Una amistad sincera, llena de apoyo y buenos deseos.  Hoy lo único que te preocupa es estar a la altura de todo el amor que esa gente tan especial te da.

Quizás es la necesidad de sentirte reinventado.  Quizás es la necesidad de sentir que el año nuevo trae nuevas cosas, nuevas historias y no sólo la repetición de viejas y trilladas excusas para justificar no alcanzar las metas trazadas.  Quizás es sólo que piensas más de lo que deberías.  Quizás es sólo que debes vivir, amar y aprender…  Sí, como el título del libro de Leo Buscaglia.

Hasta la próxima, hermano de mi alma.  Y gracias por seguir siendo tan buena compañía para conversar…  Conmigo.

Palabras de Sabiduría:

El único obstáculo real entre tú y tu felicidad
no es otro más que tú mism@…